¿SABES QUÉ BUSCA TODO CLIENTE QUE CONTRATA CUALQUIER SERVICIO DE TU AGENCIA DE MARKETING DIGITAL?
No quiere que le diseñes una preciosa página web que pueda aparecer en los Best Web Design Awards.
No quiere que consigas que se abra cada uno de los correos de su campaña de email marketing.
No quiere que posiciones su negocio, producto o servicio en los primeros lugares de las SERP de Google y conseguir más visitas.
No quiere que le ayudes a conocer mejor y segmentar a sus potenciales o clientes.
No quiere que consigas que se haga clic y escalar sus anuncios en Facebook, Instagram, Google, YouTube Ads, etc.
No quiere que mejores su SEO y el de sus contenidos para aumentar su visibilidad.
No quiere que le escribas textos que seduzcan y enamoren (como dicen por ahí copywriters de nuevo cuño).
NO.
Todo cliente que contrata cualquiera de los servicios que ofrece tu agencia de marketing digital solo quiere una cosa.
Y te adelanto que es la misma que tú quieres para ti.
(La misma que yo para mí).
Pero antes de compartirla contigo quiero que sepas cómo puede ayudarte a conseguir este profesional de la redacción persuasiva ESO que quiere el cliente de tu agencia y que aún no te cuento.
El mismo al que han despedido de su último puesto como copywriter dentro del departamento de marketing online de una empresa de SaaS.
Porque este es mi objetivo:
Que quieras trabajar conmigo, me contrates o contrates mis servicios.
En algún momento.
Donde trabajas ahora o donde lo hagas en tu futuro.
(Aquí es donde dejas de leer).
Y ahora el salseo.
Mi fracaso profesional y el secuestro de las emociones.
Lo estudió Daniel Goleman -el secuestro de las emociones, no mi fracaso, claro-.
Uno de los psicólogos más famosos de los últimos años, en su conocido libro “Inteligencia emocional”.
Si no sabes de lo que hablo, no pasa nada. Quizás no estés dentro del perfil que me debería contratar.
Para entendernos, el secuestro emocional -en un contexto de compra- hace referencia a que nuestras emociones pueden bloquear nuestra capacidad de pensar. Y nos enfocamos en el hecho de la compra sin estar en un estado racional.
Las emociones nos sitúan en un estado de predisposición a la compra que puede ser activado por distintas fuerzas.
En consecuencia necesitas comunicarte con tus potenciales compradores de forma diferente.
Tu comunicación comercial o la que desarrollas para los clientes de tu agencia debería trabajar las 5 palancas que ponen al potencial cliente en disposición de comprar.
Las que se basan en la emoción que todos sentimos en este momento.
Las que lo llevan a la situación más parecida al momento de compra.
Porque aunque queramos creer que somos seres racionales, la realidad nos dice otra cosa.
Recuerda para siempre que en el momento de comprar somos pura emoción.
O sea, que mis textos persuasivos como
Facebook, Instagram y Google Ads,
correos de campañas de email marketing,
landing pages,
funnels de venta,
Vídeo Sales Letter en YouTube,
o posts para el blog,
no fueron capaces de activar esas 5 palancas que podrían haber conseguido cambiar el estado mental de los potenciales clientes de esta empresa de SAAS y moverlos hacia la compra.
Mis textos de venta no vendían suficiente.
No daban para pagar mis nóminas.
No daban para generar mayores beneficios a los inversores.
Conclusión: despido de copywriter por motivos objetivos.
Telemáticamente.
Y así llegamos a lo que te interesa.
¿Qué es lo que quiere todo cliente que contrata cualquiera de los servicios que ofrece tu agencia de marketing digital?
¿Qué lo mismo que tú quieres?
¿Qué lo mismo que yo quiero?
GANAR MÁS DINERO.
Obtener más beneficios gracias a lo que invierte en tu agencia.
Si su ROI no es positivo, bye bye agencia.
Así que cualquier profesional que se dedique al marketing digital debe tener un único objetivo en mente.
Tú.
Yo.
Solo un objetivo: conseguir que su cliente gane dinero.
Solo imagínate esta situación.
Si tu cliente no consigue más clientes, generar más ingresos o mejorar su negocio de la manera que sea después de haberos contratado
tu agencia será un gasto para él y no una inversión,
tú lo serás para tu CEO.
La agencia no tendrá futuro.
Tu puesto no tendrá sentido.
No serás viable a medio plazo.
¡Pum!
Conozco esa sensación. Acabo de estar ahí.
El buen copy genera ventas.
Convierte palabras en futuras ventas.
Ahora considera todo lo leído hasta aquí.
Identifica en tu agencia la acción de marketing online que para ti y para tus clientes va a generar mayor rendimiento en el periodo de tiempo más corto.
Si en ella está implicado el copywriting -la contratación de un copywriter muy bueno, no de los otros, también es una actuación de marketing-, hablemos.
En esta landing page o carta de venta estoy aplicando esas 5 palancas de las que te hablé arriba. Las que facilitan cambiar el estado mental de un potencial cliente y moverle hacia la compra.
En concreto, hasta aquí, he utilizado 4 de ellas de forma simple.
Y tú eres mi potencial cliente.
Aunque no me preocupa que no te hayan llevado todavía a plantearte contratarme.
No siempre se vende con el copywriting. Esta técnica no es infalibe.
También puede que tengas otro copywriter y creas que no lo necesitas.
Tampoco me preocupa.
Ni parecer arrogante con este comentario.
Ni con lo que sigue.
Pero recuerda.
Tu cliente, tu agencia, tú y yo tenemos el mismo objetivo.
Trabajamos en marketing on line para ganar pasta.
Eso sí.
Como yo no sé lo que tú pides para trabajar con alguien, sí te digo lo que pido yo.
No trabajo a cualquier precio.
No me gusta trabajar con personas que no saben a quién venden lo que venden. Sean estas sus clientes o los clientes de sus clientes.
No me gusta trabajar con personas que no creen en la capacidad del copywriting como herramienta de persuasión que ayuda a vender más.
Como tan poco me gustan los convencidos de que es la pócima infalible que resuelve todos los males de su falta de ventas.
El marketing on line es un conjunto.
Todo suma.
Pero muchas veces, cualquiera de sus patas mal planteadas o desordenadas, resta.
No me anima a levantarme cada lunes el trabajar con personas que no respeten mi criterio. Si vas a contratar a alguien que respetará el tuyo en tu ámbito, te pediré lo mismo.
Si no, no perdamos el tiempo. Que redacte otro.
No hago pruebas de redacción.
Y menos, gratis.
Solo me las plantearía ante un brief excelente (que nunca se proporciona en el caso de las pruebas).
Si yo mañana contrato a un abogado para que me lleve un caso, ¿le pido una prueba?
O a un fontanero, ¿le digo primero que quite y ponga el mecanismo de descarga de la cisterna de váter para comprobar si sabe? Y si no me gusta cómo lo hace, ¿le digo que se marche y no le pago?
¿Acaso no tiene los contratos periodos de prueba?
¿Acaso no me puede hacer la prueba otro copy que yo crea mejor que yo y la envío en mi nombre?
Ya.
Y ahora viene lo de que «cómo sé cuál es tu estilo».
BMW.
Telepizza.
Banco Santander.
Scoreapps.
Orange.
Frumecar.
Tecam.
Movistar.
Decathlon.
Cunef.
Johnson&Johnson.
Bankinter.
Kiwoko.
Opel.
Prosegur.
Microsoft.
Havana Club.
Teatro Real.
Carrefour.
Microsoft.
Estas marcas, ¿hablan igual?
Pues he vendido para todas ellas. Y para bastantes más.
Y esta misma página que lees es otro ejemplo de estilo de redacción.
Termino.
Conectar con mi perfil en Linkedin lo puedes hacer en cualquier momento. Aunque si no quieres procrastinar puedes hacerlo ya desde este enlace.
Pero contratarme o contratar mis servicios como copy será más difícil y mayor la inversión según avancen las semanas.
Por cierto.
El 98% de los textos de venta de la empresa de la que me despidieron se los escribía el CEO.